Cuando la primera temporada de Severance (2022) finalizó, los espectadores ya sabían que se trataba de una obra cuidada al detalle. Al culminar la segunda temporada -el pasado 21 de marzo- y después de haber esperado casi tres años entre una y otra, la serie ya contaba con un amplio séquito de fanáticos que esperarían pacientemente, si hiciera falta, otros tres años más para continuarla.
En esta historia de ciencia ficción que navega entre lo tenebroso y el humor, cuyo escenario principal es una oficina, el color es el marco perfecto. No es parte de la ambientación. No es un añadido. El color es la trama.
En Severance, la historia se centra en las emociones. En un intento por dominarlas hasta el extremo, Lumon (la empresa donde trabajan los protagonistas) ha creado un chip que permite separar tus recuerdos al ir a trabajar, existiendo una parte de ti que solo vive en la oficina (el ‘dentri’ o ‘innie’), y otra parte de ti que no recuerda lo que haces en ella (el ‘fueri’ o ‘outie’). Mark Scout, el protagonista, decide someterse a este procedimiento tras perder a su mujer, mudándose a un apartamento en Kier (la ciudad donde se sitúa Lumon). Dentro de las oficinas de Lumon, comparte espacio con Helly R, Dylan G e Irving B. Cada personaje encarna emociones que nos guían a través del relato. Y si las emociones se representan con algo, es con color.

Severance Office. Apple TV Plus. Vía polygon.com
En Kier, la ciudad ficticia elegida para la serie, existe un invierno perpetuo. Los colores fríos dominan las escenas, y en las contadas ocasiones en que se vislumbra el mundo exterior, siempre está nevando y el cielo es gris. A medida que avanzamos en la serie, el espectador comprende que esto no es casual. Los contados flashbacks de la segunda temporada revelan que en el pasado, Mark es feliz. Y cuando existe felicidad, existen colores cálidos. Su antigua casa está repleta de color y de vida, un contraste muy notorio con su actual apartamento.


1. Mark's House. Vía Apple TV; 2. Severance 2022. Secuencia. Vía Apple TV.
Dirigida en su mayoría por Ben Stiller, Severance utiliza las oficinas de Lumon como escenario principal. Allí, todo es aséptico. Un edificio compuesto por espacios diáfanos y elementos retro que dejan sin desvelar en qué época se ambienta la serie. La tecnología actual convive junto a los equipos informáticos de Lumon, más propios de la década de los 80. Al acceder al departamento de refinamiento de macrodatos (el departamento donde trabaja Mark), se convierte en una sucesión de pasillos blancos y retrofuturistas. Una escenografía que bien podría ser obra de Kubrick o de Lanthimos, pero que los creadores de la serie consiguen hacer completamente suya. La fotografía de Severance es peculiar e identitaria.



1. Print Issue. Severence Hallway Publicity EMBED. 2022. Vía Apple TV; 2. Mark S. (Adam Scott) about to participate in a dreaded office ice breaker on the Apple TV+ series "Severance." Apple TV+. Vía CNN Entertainment; 3. Mark passing by the reception to head to the Severed Access area (S01E01 at 7-10). Vúa reddit.com
Al blanco predominante se le suma el azul, y ocasionalmente, algunos toques de verde. En Severance, el color segmenta y orienta al espectador. Todo lo que representa al interior (incluida la vestimenta de los ‘dentris’) es azul. El mundo de los ‘fueris’ es predominantemente rojo. El Mark de fuera viste con tonos rojos, bebe vino tinto, y tiene dos peces, convenientemente de colores rojo y azul, un reflejo exacto de su propia dualidad.
En Severance, no hay doble truco con el color. La fotografía de la serie le da tanto protagonismo al color que forma parte de la narrativa en cada momento. Sentir angustia y aislamiento es totalmente inevitable en Lumon. El blanco que impregna los pasillos consigue a la perfección deshumanizar el ambiente de oficina. Mark vive en un barrio financiado por la empresa, y por eso las casas tienen el mismo aspecto. Sin embargo, la casa de su hermana Devon tiene un aspecto mucho más acogedor, con madera y colores cálidos. El personaje de Devon (a priori) queda fuera de este mundo estéril. No en vano, uno de los temas cruciales de la serie es la vida en sí misma, y ella acaba de ser madre, así que todo lo que rodea su entorno genera este aura familiar.

Severance. Secuencia Helly R. Cortesía Apple TV Plus. Vía polygon.com
El rojo solo se introduce en Lumon, como podía esperarse, como una forma de disrupción. Cuando algo no ocurre como debería, cuando los personajes se separan de lo establecido, aparece ante nuestros ojos el color rojo. Ya sea una pelota, el libro de Ricken, la misteriosa luz del ascensor para salir de Refinamiento de Macrodatos o el pelo de Helly R. Los elementos varían y el protagonista es el color. Precisamente Helly encarna la rebeldía, la humanidad, la emoción. Por eso la escena final de esta segunda temporada impacta de una manera especial: los blancos pasillos de Lumon, ahora iluminados con luces rojas que indican peligro, pero también rebelión, amor, aventura, emoción. El triunfo de los ‘dentris’ reivindicando su autonomía, su humanidad. El triunfo de las emociones en el lugar donde se empeñan en ocultarlas.


1. Severance secuencia. Vía Apple TV; 2. Severance secuencia. Vía Apple TV; 3. A behind-the-scene photo of the elevator lobby, courtesy of Apple. Vía reddit.com
Así que, ¿es posible que el color juegue un papel tan determinante en una serie?
La psicología del color se aplica con rigor en Severance para provocar emociones determinadas. Los espectadores ya saben que la elección de colores no es casual, y eso hace que se genere un vínculo comunicativo, un pacto entre creadores y público que enriquece la narrativa.
El color en Severance es la trama, pero también es un personaje en sí mismo. Es un hilo conductor que mueve el relato hacia delante. En este mundo ficticio del que apenas se ha desvelado el gran misterio (¿qué pretende realmente esta millonaria empresa?), el color seguirá siendo un fiel guía en el que poner la atención para obtener pequeñas pistas e ir descifrando este inquietante thriller de oficina.