En el centro del barrio Malasaña en Madrid, hay un primer piso en la Calle Valverde que jamás pensarías lo que alberga dentro. Casi 200 m2 de lienzos y lienzos. Paredes totalmente cubiertas de pintura, materiales y cuadros de más de 20 años son el recorrido creativo de Papartus alias "Paco".
Ventanas cerradas, luz de laboratorio. Lo que menos interfiera en la percepción de lo que uno ve cuando se pone delante de un lienzo y busca establecer una conversación con él.
Papartus (Burgos, 1956) es de los pocos artistas que en España arriesgan a llamarse por un seudónimo. Es para él, una manera de seguir conectado con su niñez y esa capacidad innata que poseemos de explorar y crear sin miedos antes de convertirnos en adultos. Pintor y artista plástico afincado en Madrid desde hace más de 3 décadas, su recorrido no ha sido indiferente para muchas galerías, ferias y la prensa nacional e internacional.
"Pintaba como todos los niños pintan, pero yo me lo tomé más en serio"
Dicen que el arte es eso que te impacta y que no puedes olvidar. Fue con el moisés del Miguel Ángel cuando Papartus conectó con el arte. Una necesidad de expresión con las manos y le esencia que uno guarda dentro. "No sabría decir cuándo, pero he continuado toda mi vida pintando. Ha sido mi obsesión"
La pintura como materia
Cuando Inés Alonso, curadora de arte y art seeker, le pregunta a Paco sobre cuando se dio la transición entre anhelar pintar representaciones figurativas como el Moisés de Miguel Ángel hasta centrarse en la abstracción, Paco defiende su amor por la pintura y no por la narración: "Si quiero saber una historia, a lo mejor prefiero leerme un libro y que me lo cuente, más que ver un cuadro. Llega un momento en que mi amor ya era por la pintura, no por la narración "
"Mi amor era por la pintura. La pintura es su textura, cuando salpica, cuando agrieta, cuando resbala, cuando brilla, cuando se mezcla, lo que es la sensualidad. La pintura si tiene algo es sensualidad."
En la exploración artística y pictórica de Papartus no hay espacio para la narración literal, para lo predecible y estipulado."...Yo con mi pintura no quiero contar nada [...] A mí lo que me interesa es la aventura de pintar."
Inés le acompaña "Bueno, es que la verdadera abstracción va de eso, de perderse en el campo de color más que interpretar formas que no hay."
Dentro de las paredes de su estudio, donde casi siempre produce su obra, hay tanto espacio para lienzos como lo hay para la duda. No desde la lectura negativa de la arbitrariedad, sino todo lo contrario. Es, en los vacíos y espacios sin definir que encontramos en nuestra interior, a los que Papartus acude de manera innata para encontrar su canal de expresión. Su conexión con la pintura es tal, que defiende firmemente la necesidad de escuchar el cuadro. "Cuando estás inmerso en una serie y ya has hecho más de 10 o 15, borro, llego al estudio y empiezo a ver qué sucede. Y llega, de alguna manera llega. Yo me dijo muchísimo en lo que manda el cuadro."
Cuando Inés dialoga sobre la importancia de crear de manera auténtica, Papartus le acompaña:
"Todos hemos tenido abuelos y padres y es imposible ser artista sin conocer lo anterior. Pero lo que es imposible es tener un mundo diferente a los demás"
Créditos:
Entrevista: Inés Alonso y Romina Llaguno
Vídeo: Rosana Pérez y Romina Llaguno
Fotografía: María Viñas
Agradecimientos a Paco "Papartus" y Galería Arma Gallery
